María Christophora y 14 hermanas mártires de la Congregación de Santa Catalina Virgen y Mártir

De la Congregación de Santa Catalina Virgen y Mártir; … los soviéticos se lanzaron sobre las Hermanas debido a su evidente estatus de religiosas, y el ultraje feroz de su castidad fue el signo más evidente. Esto se confirma también por la ferocidad de los propios soldados hacia los símbolos religiosos de las Hermanas: los velos, los rosarios, las estampitas y, sobre todo, su hábito, casi siempre cortado y rasgado.

La Causa trata sobre el martirio de quince Hermanas pertenecientes a la Congregación de Santa Catalina Virgen y Mártir, todas fallecidas entre el 22 de enero y el 25 de noviembre de 1945, durante la invasión rusa en Polonia. Ellas son:

1. Hermana María Christophora (Marta) Klomfass. Nacida en Raschung (Rasząg) el 19 de agosto de 1903, hizo sus votos religiosos el 25 de abril de 1928. Después de vivir en varias comunidades, en 1937 fue transferida como Enfermera y Maestra en la Escuela de Enfermería del St. Marienkrankenhaus de Allenstein. Fue asesinada el 21 de enero de 1945. Tenía casi 42 años.
2. Hermana María Liberia (Maria) Domnick. Nacida el 12 de octubre de 1904 en Klawsdorf-Waldhaus (Gajówka-Klewińska), emitió sus votos religiosos el 20 de octubre de 1932. Desde 1939 fue enfermera en el Marienkrankenhaus de Allenstein, donde sirvió como Segunda Asistente de Sala de Operaciones. Fue asesinada el 22 de enero de 1945, alcanzada por una bala mientras estaba en la calle, procurando alimentos para el Hospital. Tenía 40 años.
3. Hermana María Leonis (Käthe Elisabeth) Müller. Nacida el 3 de febrero de 1913 en Danzig (Gdańsk), emitió sus votos religiosos el 2 de mayo de 1938. En 1944, en el convento de Allenstein, trabajaba en la administración del Hospital Marienkrankenhaus. Capturada por el Ejército Rojo el 22 de enero de 1945, fue violada repetidamente por 8 soldados soviéticos y, el 27 de enero, encarcelada junto con otras hermanas. El 9 de febrero fue trasladada al Campo de Zichenau (Ciechanów) para ser deportada a Rusia el 16 de marzo, donde probablemente murió el 5 de junio de 1945, debido a las violencias sufridas. Tenía 31 años.
4. Hermana María Mauritia (Anna) Margenfeld. Nacida el 24 de abril de 1904 en Engelswalde (Sawity), el 20 de octubre de 1932 emitió sus votos religiosos. En 1937 fue trasladada a la comunidad de Hermanas de Allenstein, sirviendo en el Hospital Marienkrankenhaus como Jefa de Dietética y Profesora de cocina en la Escuela de Enfermería. Capturada por el Ejército Rojo y violada repetidamente por soldados soviéticos, fue llevada en marcha forzada hasta Praschnitz (Przasnysz), para ser llevada al día siguiente, también a pie, a Zichenau, a 27 km de distancia. De allí, fue deportada a Tula, donde cuidó a los enfermos de tifus. Murió por los maltratos el 7 de abril de 1945. Estaba a punto de cumplir 41 años.
5. Hermana María Tiburtia (Cäcilia) Mischke. Nacida el 27 de octubre de 1888 en Krokau (Krokowo), emitió sus votos religiosos el 12 de octubre de 1909. Capturada por los soviéticos el 21 de enero de 1945 en Allenstein, fue violada y maltratada durante toda una noche. El 23 de enero fue encarcelada y, el 3 de febrero siguiente, fue llevada en marcha forzada a Praschnitz (Przasnysz), desde donde fue deportada a Tula, en Rusia. El 7 de agosto de 1945, después de asistir a otras hermanas y a los enfermos, debilitada y habiendo contraído tifus, murió en el Campo de Osanowa, en Rusia. Tenía 56 años.
6. Hermana María Sekundina (Barbara) Rautenberg. Nacida el 23 de diciembre de 1887 en Blankenberg (Gołogóra), en 1912 emitió sus votos religiosos. En Rastenburg (Kętrzyn), en el Convento de Fischerstrasse, fue asesinada el 27 de enero de 1945. Tenía 57 años.
7. Hermana María Adelgard (Agathe Euphemia) Bönigk. Nacida el 5 de febrero de 1900 en Altmark (Stary Targ), el 20 de abril de 1926 emitió sus votos religiosos. En Rastenburg, donde ayudaba en la iglesia parroquial y en la asistencia a los enfermos, fue asesinada el 27 de enero de 1945. Estaba a punto de cumplir 45 años.
8. Hermana María Aniceta (Clara Anna) Skibowski. Nacida el 12 de agosto de 1882 en Groß Bertung (Bartąg), el 25 de abril de 1905 emitió sus votos religiosos. Fue asesinada en Heilsberg, donde trabajaba como enfermera, el 2 de febrero de 1945. Tenía 62 años.
9. Hermana María Gebharda (Maria) Schröter. Nacida el 1 de diciembre de 1886 en Karschau (Karszewo), emitió sus votos religiosos en 1918. Fue asesinada en Seilergasse de Heilsberg el 2 de febrero de 1945. Tenía 58 años.
10. Hermana María Sabinella (Rosalia) Angrick. Nacida el 29 de septiembre de 1880 en Schöndammerau (Dąbrowa), el 3 de abril de 1902 emitió sus votos religiosos. Fue asesinada en el Convento de Heilsberg el 2 de febrero de 1945. Tenía 64 años.
11. Hermana María Bona (Anna) Pestka. Nacida en 1905, emitió sus votos religiosos el 30 de abril de 1932 y los perpetuos el 30 de abril de 1935. Contrajo tuberculosis y fue hospitalizada en el Hospital Andreasberg en Wormditt (Orneta), donde fue golpeada por soldados del Ejército Rojo el 14 de febrero de 1945. Murió como resultado de los golpes el 1 de mayo de 1945. Tenía aproximadamente 40 años.
12. Hermana María Gunhild (Dorothea) Steffen. Nacida el 2 de septiembre de 1918 en Rosenwalde (Wola Wilknicka), el 26 de octubre de 1939 emitió sus votos religiosos. Mientras trabajaba en el Hospital Marienkrankenhaus de Allenstein, contrajo tuberculosis pulmonar. Hospitalizada en el Sanatorio de Wormditt, fue violada, golpeada y torturada por soldados el 14 de febrero de 1945. Recibió tres disparos, que causaron su muerte el 30 de mayo de 1945. Tenía 26 años.
13. Hermana Maira Rolanda (Maria) Abraham. Nacida el 17 de junio de 1914 en Tolkemit (Tolkmicko), el 2 de mayo de 1938 emitió sus votos religiosos. Contrajo tuberculosis pulmonar y fue hospitalizada en el Sanatorio Andreasberg en Wormditt. Después de ser violada y golpeada por soldados del Ejército Rojo el 14 de febrero de 1945, murió el 2 de julio de 1945. Tenía 31 años.
14. Hermana María Charitina (Hedwig) Fahl. Nacida el 10 de marzo de 1887 en Bürgerwald (Miejska Wola), el 29 de abril de 1912 emitió sus votos religiosos. Mientras servía como Vicaria General de la Congregación, el 22 de febrero de 1945, las autoridades alemanas emitieron la orden de evacuar a la población civil de Braunsberg y, entre el 23 y el 24 de febrero, las Hermanas fueron cargadas en camiones de las SS y llevadas a Heiligenbeil (Mamonowo), donde abordaron un ferry hacia Danzig. Allí sufrieron la agresión de soldados del Ejército Rojo. La Sierva de Dios intentó proteger a las Novicias pero fue golpeada y golpeada con el culatazo del rifle. Murió el 5 de junio de 1945 debido a las heridas sufridas. Tenía 58 años.
15. Hermana María Xaveria (Maria) Rohwedder. Nacida el 25 de mayo de 1887 en Plal wich (Płoskinia), el 23 de abril de 1907 emitió sus votos religiosos en Braunsberg. Mientras viajaba a Alemania, en la estación de Deutsch Eylau (Iława), fue duramente golpeada por un soldado. No pudo tomar alimentos debido a las heridas, y murió el 25 de noviembre de 1945, en el tren cerca de Schneidemühl (Piła). Tenía 58 años.

En los días en que el Ejército Rojo entró en Polonia, el contexto estuvo marcado por la propagación de la ideología atea y comunista que se oponía a la Iglesia Católica, sus estructuras y sus representantes, considerados perjudiciales para los intereses del comunismo.

Respecto al martirio material, algunas Hermanas fueron asesinadas de inmediato, mientras que otras murieron después de algún tiempo debido a las violencias sufridas. En cuanto al elemento formal ex parte persecutoris, el Ejército Rojo estaba compuesto por oficiales y soldados impregnados de ideas ateas y contrarias a la Iglesia Católica, y las Hermanas eran reconocibles por llevar el hábito religioso. Fueron violadas y golpeadas con extrema crueldad, señal de un odio feroz hacia ellas. No se puede descartar una hostilidad también debido al hecho de que todas eran de origen alemán. Pero además de esta probable voluntad de venganza, los soviéticos se abalanzaron sobre las Hermanas por su evidente condición de religiosas y el ultraje feroz de su castidad fue el signo más claro. Esto parece confirmarse también por la ferocidad de los propios soldados hacia los símbolos religiosos de las Hermanas: los velos, los rosarios, las estampitas y, sobre todo, su hábito, casi siempre cortado y rasgado. También se debe considerar mártires a las Hermanas que murieron de tifus en los campos de concentración rusos, ya que se enfermaron debido a las terribles condiciones en las que vivieron, pereciendo de las penurias del cautiverio.

El martirio formal ex parte victimarum es claro. Las Hermanas permanecieron fieles a su vocación aceptando el riesgo, con tal de quedarse al lado de los enfermos, los niños y los huérfanos. A pesar de tener la oportunidad de huir, como lo hicieron otras religiosas también de la misma Congregación, permanecieron en su lugar dedicándose al bien del prójimo. La fama de martirio ha perdurado en el tiempo, especialmente en los lugares donde ocurrieron los hechos y dentro de la Congregación a la que pertenecían.